Silvia Laia y Felipe Lecaros

Notes for Growth: Una Fundación dedicada a tender puentes entre Chile y Estados Unidos.

Silvia Iaia y Felipe Lecaros son una pareja italo-chilena que trabaja por un propósito común: acercar la música a personas de comunidades vulnerables. Esto lo hacen a través de entregar pianos en comodato. Silvia y Felipe se conocieron en Chile y conectaron por su amor por el arte, la belleza y la cultura que ambos tenían. Actualmente, son socios y dirigen juntos en la Fundación Notes for Growth.

Silvia es italiana y llegó a Chile en el 2016 a trabajar en la empresa EDF (Électricité de France) y, en sus palabras llegó “por trabajo y se quedó por amor”. Hasta este año estuvo trabajando como Directora de Proyectos de almacenaje de energía en EDF, pero ahora decidió enfocar sus energías en ser coach profesional y en dirigir la Fundación. Felipe es un abogado chileno que desarrolló sus primeros años de carrera en Estados Unidos, donde estudió en la Universidad de Duke y trabajó en el sector de importaciones y exportaciones. Desde el 2015, volvió a Santiago a trabajar en un estudio jurídico donde asesora a empresas internacionales que están haciendo negocios en Chile y es Gerente Legal de la empresa Ingeniería y Construcción Sigdo Koppers

Desde Antenna nos interesa conocer sobre los intereses y pasiones de nuestros socios, así que tuvimos una conversación con ellos sobre su pasión por la música y la misión de su Fundación.

  1. ¿Cómo ha recibido la fundación el público chileno?

Felipe: Increíble. La demanda es alta, aunque no es fácil mapearla. Lo que hacemos es que ponemos todo online, los espacios que necesitan un piano pueden postular y un comité de selección decide  cuál piano podemos darles. Una escuela, por ejemplo, no necesita un piano de concierto. Así que así vamos identificando las necesidades y asignando los pianos. Los pianos no los donamos, los entregamos en comodato con algunas condiciones de mantenimiento mínimas. Así nos reservamos el derecho de sacarlos si algo pasa o de hacer un cambio si es que las necesidades de la comunidad cambian. Silvia: Actualmente tenemos 35 pianos en la Fundación, de distintas marcas y calidades. Tenemos dos en un lugar como el Teatro Municipal, hasta escuelas en barrios muy pobres. Hace un par de semanas entregamos uno de los últimos pianos que teníamos en bodega a una fundación que se llama Entre Olas, donde le enseñan surf, inglés y música a los niños de Curanipe y Pelluhue.

  1. ¿Hay alguna entrega o historia memorable?

Silvia: Cada entrega ha sido especial.Felipe: Nos regaló un piano el mismísimo Yoda. Frank Oz, que es el titiritero detrás de Yoda y algunos de los Muppets, nos donó un piano que sacamos del Flatiron District en Nueva York, en perfecto estado. Un tiempo después, nos contactó para saber dónde había quedado su piano y ahí nos dimos cuenta de que era un personaje famosísimo. El piano lo pusimos en comodato en la Orquesta de Cámara de Valdivia, de la cual Roberto Fischer, destacado director chileno/suizo, profesor de dirección orquestal en la Musik Akademie de Basilea, es el Director Musical. Silvia: Esto es solo un ejemplo de la conexión que las personas tienen con los pianos y el interés que tienen en saber a dónde va. Algunos donantes acompañan los pianos de cartas dirigidas a las fundaciones que van a recibirlos. Felipe: Para incentivar este interés y cultivar esas relaciones, uno de los planes que tenemos es ponerle trackers a los pianos para que las personas puedan saber dónde están sus pianos. Silvia: La primera donación fue a Renca, a la municipalidad. Ahí coincidió con el inicio de la Pandemia así que fue un poco complicado. El segundo fue en Puente Alto, tuve que ir sola y fue muy emocionante ver la ilusión con la que recibieron el piano. Hemos entregado pianos en Frutillar, en el Teatro del Lago, en Panguipulli, en la Universidad Australis en Puerto Montt.. De verdad han sido muy bien recibidos y ha sido muy emocionante. Felipe: Tenemos dos en la Pintana, en la Pincoya, en Santiago Centro… En muchas comunas. Lo más lindo es ver cómo la gente los toca y eso les transforma la relación con la música.

  1. ¿Cuáles son los próximos pasos para Notes for Growth?

Felipe: Queremos viajar más a Nueva York y Miami para fortalecer la Fundación ahí. Silvia: Ahora que voy a tener más tiempo para dedicar a la Fundación tengo muchos desafíos. Por un lado, re-armar el equipo porque la gerente ejecutiva se fue; mejorar la cadena logística y organizar eventos para difundir la labor que estamos haciendo y sensibilizar a las familias para que lleven a sus niños a las clases de piano. Por esto queremos hacer conciertos en las comunas más vulnerables, el Teatro Móvil, para que las familias se puedan acercar al piano y los niños puedan conectar con la música y despierten sus ganas de aprender. Felipe: Tenemos muy buenos embajadores acá y en Estados Unidos. La mayoría son músicos profesionales que conectan con nuestro propósito. Queremos sumar más colaboradores.

  1. ¿Hacer parte de la comunidad Antenna ha tenido algún impacto en la Fundación?

Silvia: En la Comunidad Antenna he conocido personas que se han interesado por la Fundación y que colaboran con nosotros. Los socios de Antenna son muy abiertos y a muchos les gusta la música, así que encaja mucho con el público de la Fundación. Cada vez que hablamos con la comunidad Antenna conectan. En la Galería Patricia Ready hicimos un concierto a beneficio de la Fundación y asistieron varios socios para apoyarnos, eso fue muy bonito. Además, esta oportunidad de compartir nuestro proyecto nos emociona mucho, ojalá poder inspirar a otras parejas a tener un proyecto en común.

Para conocer más sobre la labor de Notes For Growth, te invitamos a visitar su página web

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